Estas fueron unas vacaciones cortas con Karen a finales de 2022, que no terminé de escribir hasta recién, pero más vale tarde que nunca.
Día 1: Navidad
Como llegamos temprano, dejamos las maletas en el hotel y salimos a hacer tiempo antes de poder registrarnos. Nuestra primera visita fue al Cementerio de Père Lachaise[1]. El cementerio tiene tumbas con distintas antigüedades, desde su inauguración a principios del siglo XIX hasta tumbas contemporáneas, pues hasta el día de hoy recibe nuevos entierros. Debido a los frondosos árboles que crecen en el lugar, también hay fauna propia del parque, incluyendo variedad de aves.
En el cementerio, las estatuas son definitivamente protagonistas
Algo que no me terminó de calzar fue el monumento a los muertos franceses en las guerra de independencia de Argelia y otras batallas en Marruecos y Túnez[2]. Incluso habiendo leído que la motivación parecía ser recordar lo inútil de mandar gente a estos conflictos, no parece haber ningún atisbo de arrepentimiento sobre el colonialismo que los motivó.
Luego de cansarnos de caminar, fuimos a comer a un local llamado Chez Papa y después volvimos al hotel a descansar.
A la noche, fuimos a un concierto de Navidad en la Iglesia de San Severino.
Día 2: Louvre
Partimos el segundo día con una visita al Louvre[3]. Lamentablemente descubrimos muy tarde cómo conseguir las audio guías (que son una aplicación propia del museo para la Nintendo 3DS).
Tratamos de ir relativamente pronto en la visita a ver la Mona Lisa. Cómo podrán haber escuchado, el tamaño del cuadro es relativamente pequeño, sin embargo la fila es bastante larga y básicamente nunca llegas suficientemente cerca para poder apreciarlo, además de tener que esquivar la mayoría de gente que solo va a tomarse la selfie.
Después de visitar el museo fuimos a un concierto de piano a la luz de las velas en la Iglesia San Efraín de Siria, que incluía la Sonata Claro de Luna[4].
Para terminar el día, fuimos a una exposición del mundo en miniatura en el Jardín de las plantas[5].
Día 3: Museo de Cera
Partimos el día visitando el Museo Grévin[6], conocido por sus figuras de cera. Aunque teníamos entradas previamente compradas, por las fechas en las que fuimos había que hacer una fila antes de entrar. A los visitantes del museo les regalaban gorros navideños.
En la tarde fuimos al Arco del Triunfo[7] y vimos la ciudad desde su cima.
Día 4: Confisserie
Aunque fue un día lluvioso, fuimos a panadería y pastelería Boris Lumé, que inspiró la de cierta serie de televisión[8].
Luego, visitamos la Iglesia de Saint-Pierre de Montmartre, que no es tan conocida como su vecina la Basílica del Sagrado Corazón. Entre la multitud y la prohibición de sacar fotos de esta última, me quedo con la primera.
Día 5: Compras
Partimos el día pasando a Decathlon[9], pues las zapatillas de Karen estaban muriendo. Luego de cumplir la primera misión, nos topamos con una tienda de arte, aunque por suerte nos controlamos al comprar.
En la tarde, pasamos a una cafetería que tenía decoraciones con motivos de colibrí y terminamos caminando hasta el Obelisco de Luxor[10].
Día 6: Victor Hugo
Por recomendación de mi hermano, visitamos la casa de Victor Hugo[11], que en sus habitaciones narra la vida y obra del autor.
En un paseo más o menos aleatorio, pasamos por una tienda Lego, con varias figuras acordes a la ciudad en exposición.
Para terminar el día, terminamos visitando el edificio de la Bolsa de Comercio de París[12], que alberga la colección Pinault. Aparte de las pinturas de la cúpula del edificio habían varias obras contemporáneas, incluida una exposición audiovisual con un tocadiscos rotando en el espacio (si la descripción ni tiene mucho sentido, las gráficas de ese video tampoco).
Día 7: Versailles
Aunque originalmente queríamos visitar el Palacio, no llegamos lo suficientemente temprano para alcanzar entrada, lo que en retrospectiva fue para mejor. Así, hicimos un recorrido por los jardines del palacio, aprovechando que no hacía mucho calor.
Para finalizar el día (y el año) fuimos a ver los fuegos artificiales al Arco del Triunfo.
Día 8: Disney
No sé si por la lluvia o por la fecha, el parque estaba con relativamente poca gente, lo que hizo la visita bastante amena, aunque me subí a más montañas rusas de lo que hubiera imaginado. Como cierre, hubo un show de fuegos artificiales en el castillo del parque.
Día 9: Panteón
Aprovechamos el último día para dar un paseo al Panteón[13]. Nos entretuvimos un rato tratando de estimar del péndulo de Foucault[14] que ahí está instalado. Primero, Karen tomó fotografías al principio y al final de un periodo completo del péndulo. Así, calculamos un periodo de . Usando la aproximación bajo pequeñas oscilaciones, el largo del péndulo es . Según Wikipedia, el largo del péndulo es de , lo que está bastante cerca del estimado que obtuvimos.
Después, pasamos al Jardín de Luxemburgo[15] a comer un picnic improvisado.
Finalmente, pasamos a la librería The Red Wheelbarrow, que está ubicada al frente del jardín, a comprar algunos libros en inglés en París.